Dos son mejor que uno"
Estoy deseando dar la bienvenida a fray Luis entre nosotros. Él será una gran ayuda y apoyo para mí como yo lo seré para él. También será un ministro maravilloso para todos. Su llegada entre nosotros inyecta nueva energía en la forma en que la administración de la parroquia apoya a las buenas personas de nuestra familia parroquial, porque dos son mejores que uno. Esta semana estoy llamando a todos los líderes de grupos parroquiales y cualquier otra persona que desee asistir para reunirse conmigo en una conversación abierta y honesta. Esta conversación es una en la que yo seré el oyente y ustedes hablarán. Quiero saber de ustedes para que Fray Luis y yo podamos tomar en consideración sus ideas, sugerencias y consejos cuando él y yo nos reunamos para presentar un nuevo programa pastoral para nuestra familia parroquial. Es mi intención y deseo crear nuevas oportunidades de fe y de enriquecimiento social para nuestra familia parroquial. No quiero que nunca estemos simplemente contentos con lo que se ofrece aquí en St. Julia. Necesitamos ser una parroquia que satisfaga las necesidades de la comunidad y enriquezca sus vidas. Valoro las ideas, las sugerencias y los consejos que puedan ofrecer. Son absolutamente esenciales para el crecimiento de nuestra parroquia. Quiero que seamos vibrantes en todos los sentidos y deseo que todos nuestros programas y oportunidades enriquezcan las vidas de todos. Una vida parroquial aburrida no tiene cabida aquí. Depende de todos nosotros crear una parroquia vibrante donde la presencia de Dios se sienta en la forma en que creamos comunidad y la comunidad que creamos. Los animo a compartir conmigo lo que les gustaría ver en nuestra vida parroquial. Quiero que me digan honestamente qué necesita mejorar, qué necesita cambiar y qué experiencias nuevas y maravillosas podemos crear para todos nosotros. Quiero escucharlos y lo que tienen que decirme. Ya saben que cuando las cosas se critican a puerta cerrada, esa crítica no lleva a nada y no nos deja en ninguna parte. Quedan solo críticas. Las críticas constructivas son buenas y las agradezco. La crítica constructiva toma en consideración lo que es mejor para el bien común y busca siempre lo bueno. Entonces, dada con respeto y honestidad, la crítica constructiva puede convertirse en un elemento importante para avanzar de una manera más informada. Mientras los invito a compartir conmigo, sepan que todo lo que quiero hacer es escucharlos y tomar en serio sus ideas y sugerencias. No crean ni por un segundo que tomaré una actitud defensiva o que me sentiré ofendido por lo que tienen que decir. Quiero escucharlos porque sé que lo que ofrecen nos ayudará a mí y a Fray Luis a desarrollar un buen programa pastoral para nuestra familia parroquial. Más valen dos frailes bien informados que uno. Están en mis oraciones y en mi corazón. Paz. Fray Julio